Dudas, preguntas y preocupaciones de una madre primeriza.

Cuando estas embarazada te surgen muchas preguntas durante las 39 semanas de gestación. Los primeros meses te planteas preguntas como:

- ¿Qué debo de comer que beneficie al bebe?

- ¿Habrá algo que no debo de comer?

- ¿Los complejos vitamínicos realmente me van a ayudar?

- ¿Qué tamaño tiene mi niño?

- ¿Cómo sé que la niña se esta moviendo?

-  ¿Cuándo se me quitaran las nauseas?

- ¿Por qué le he tomado asco al café?

- ¿Qué es la curva de azúcar?

- ¿Podré seguir haciendo deporte?

- ¿Cuándo se me quitaran los ardores?

- ¿Sabré cuidar de mi hijo?

- ¿Quiero la epidural?

- ¿Sera el parto doloroso?

A medida que van pasando las semanas y los meses vas hablando con amigas, primas, tías y hasta mujeres que te encuentras en la cola del supermercado y cada una te va contando sus experiencias, vivencias y algun que otro cuento de viejas. Con toda estas conversaciones te vas haciendo una leve idea de como puede ir todo y hasta te pueden ayudar a aclarar alguna duda.

Yo disfrute mucho ambos embarazos de mis hijos. Siempre intente estar bien informada de todo lo que me sucedía y que era lo que podía esperar. Gracias a una compañera de trabajo que me regalo un libro pude resolver mas de una duda o preocupación. El libro es un clásico en los Estados Unidos y se titula “What to expect when you are expecting” Este libro lo puedes encontrar en español y se titula “Que puedes esperar cuando estas esperando”. (Os ofrezco un link de donde puedes conseguir el libro.)  

Próximamente (20 Julio) en España estrenaran una simpática película con este mismo titulo.

Me fue de gran ayuda y me aclaro muchas preguntas que tuve durante el embarazo. Curiosamente en mi segundo embarazo, que no tuvo nada en que parecerse al primero, eventualmente le echaba un vistazo para refrescarme la memoria.

Quiero creer que fui una embarazada positiva y que disfrute los embarazos en su plenitud. Entendía que el embarazo era un estado y no una enfermedad. Había algunas cosas que me resultaban dolorosas o incomodas pero que eran pasajeras y que no seria un mal eterno e incurable. El embarazo lo mostraba con orgullo y con  alegría. Aunque realmente las piernas las tenia hinchadas, los ardores me amargaban las comidas y las noches sin dormir por la incomodidad del vientre abultado me angustiaba.  Pero en realidad todos esos pequeños efectos secundarios no me iban a arrebatar el gran privilegio que tenia de ser la fábrica de mi futuro hijo. Solo yo era la que sentía cuando el niño se movía, solo yo notaba cuando tenia hipo, solo yo era la que sentía cuando me presionaba la vejiga y solo yo era que notaba cuando se sobresaltaba el niño al oír un ruido fuerte.

Pero en realidad lo que me resultaba más intrigante eran los cuentos de viejas.  Te preguntaras que quiero decir con eso de “cuentos de viejas”. Son esos comentarios que te hacen las personas que te encuentras, a lo largo del embarazo, que te hacen comentarios como:

-          Si tienes ardores es que el niño va a tener mucho pelo.

-          No cruces las piernas que se le lía el cordón umbilical alrededor del cuello al niño.

-          Tienes la barriga puntiaguda, significa que vas a tener un niño.

-          No comas zanahorias que cuando nazca el niño se te pone amarillo.

-          No te hagas tanto ejercicio que ahogas al niño.

-          Comete lo que quieras para que al niño no le salga un ‘antojo’ (refiriéndose a alguna mancha en la piel)

-          En la próxima luna llena seguramente darás a luz.

Prometo que todas esas frases se me ha dicho en algún momento de uno de mis dos embarazos. Sinceramente desconozco si tienen alguna base científica, pero sinceramente cuesta mucho creérmelo en más de uno.

Si estas embarazada o lo has estado. ¿Recuerdas algún comentario extraño que te haya sorprendido como los que he contado? Me encantaría que los compartierais conmigo.

¡Buen fin de semana!

Rebecca